sábado, 5 de febrero de 2011

Lo que queda

A veces, lo único que nos queda para seguir adelante es un recuerdo. Irónicamente, eso es lo único que quedará de nosotros algún día. Y también se lo llevará el tiempo, tarde o temprano.




Este jarrón deforme que me viste
No sabe ya ocultar golpes ni grietas.
Ajado uniforme, que no resiste
ya el paso del Tiempo o sus jugarretas.

Ocultar el dolor tras un lienzo
Que me esfuerzo en llenar de colores.
Pinceladas que confunden tus besos,
Y barnices que esconden mis temores.

Y te espero como el juguete roto
En el baúl de tus viejos amores
Condenado a recordar tus ojos,
Exiliado al perder tus favores.

Y te grito que te des la vuelta,
Y abraces fuerte este trozo de carne
Dolorida, asustada, sedienta
Del amor que un día proclamaste.

Mas te alejas con alas de viento,
Y te llevas todo tu equipaje
Y te olvidas que decir te quiero
No me hará más sencillo el viaje.

Árbol seco, frías cenizas, polvo, aire.
Un recuerdo. Y Nada.
Y Nadie.

1 comentario:

David Cotos dijo...

tienes razón nos quedan recuerdos.